Jezzarte : enero 2019

Historia del arte: Mi interpretación

By Jezzarte - enero 28, 2019

“Toda la historia del arte no es la historia de perfeccionamientos técnicos, si no, la historia del cambio de ideas y exigencias.”

E. H. Gombrich.

Existen muchas formas de interpretar a la historia y no se diga a el arte. Sin embargo, bajo mis conocimientos y experiencias para mí el arte, por hecho, es el resultado de la sociedad que lo genera. No sólo se da en la Historia, sino con la Historia. Refleja las condiciones y circunstancias bajo las cuales fue concebido. Es un emisor estático. Por lo que, si se le quiere comprender, es fundamental no interpretar bajo el mirar contemporáneo. El concepto que correlacionamos con lo que es el arte hoy en día, es relativamente nuevo. No podemos esperar vislumbrarlo con especulaciones del presente, por lo que será vital para concebirlo en su paso por la historia de la humanidad, contextualizarlo. Ponerse en la piel de quien alguna vez pintó, esculpió o labró y saber que el arte, la cultura, el tiempo y la sociedad, no irán jamás separados.

Algunos escritos que estaré haciendo por aquí se basan en este mirar que yo le doy a a la historia del arte. También, dejaré los términos fundamentales para entender cómo manejo ciertos conceptos en las entradas de Cultivarte.

Arquitectura: Manejada bajo la visión de ser la satisfacción de la necesidad de cubrir un espacio para protegerse de la intemperie y albergar en el interior las condiciones ideales para el ser humano, con distintos motivos o fines.

Cerámica: Se entiende por cerámica a el producto de diversas materias primas, especialmente arcillas, que se fabrican en forma de polvo o pasta y se someten a un tratamiento térmico.

Escultura: Consiste en tallar, esculpir, moldear o cincelar algún material, con el objetivo de crear una figura con volumen.

-En relieve: Donde se tiene profundidad en el material.

-En bulto: Donde la pieza puede verse a 180°, porque tiene un respaldo.

-En exenta: Donde la pieza puede verse a 360°.

Pintura: Es cubrir con color cierta superficie. Con el propósito de representar o sugerir algo, a través de las cualidades compositivas, como la línea, el color y la forma.

Suntuaria: Comprenderse como todo aquello que es un atributo o con función decorativa. Piezas que tienen importancia bajo términos simbólicos o económicos.

Ritos funerales: Arte que está enfocado en la muerte, el difunto, el enterramiento, su resguardo o algún otro enfoque bajo la misma espacialidad temática.

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BIBLIOGRAFÍA, REFERENCIAS Y RECURSOS

LIBROS

Gombrich, E. H. (1990). Historia del Arte. España: Alianza Editorial.

National Geographic. Maravillas del Mundo Antiguo. RBA Publicaciones, S.A. España. 1994.

Bottéro, Jean. La religión más antigua: Mesopotamia. Editorial Trotta. Madrid. 2001.

Lozano Fuentes, José Manuel. Historia del Arte. Co. Editorial Continental. México. 2001.

Crónica de la humanidad. Plaza & James, Editores, S.A. Barcelona. 1984.

Hauser, Arnold. Historia Social de la Literatura y el Arte. Tomo I, Desde la Prehistoria hasta el Barroco. Ed. Debate. España. 1998.

Elliade, Mircea. Historia de las creencias y las ideas religiosas. Editorial Cristiandad. España. 1978. Rose-Marie & Rainer Hagen. Los secretos de las obras de arte. 100 obras maestras en detalle. Editorial Taschen.

MUSEOS

Museo Nacional de las Culturas. Apartado del Mediterráneo.

Metropolitan Museum of Art. Visita virtual.

British Museum. Blogs.

Louvre Museum. Acervo fotográfico.

RECURSOS

Audilibro de Gombrich, E. H. Historia del Arte.

Videos producidos por CrashCourse.

Documentales: Más humano que lo humano. La historia del arte en tres colores. BBC.

PÁGINAS WEB

Idea. Concepto y proceso en la creación artística. Gombrich, E. H. Recuperado de: http://aliciaciudad.blogspot.es/1229466840/gombrich/

El arte de los pueblos de la Mesopotamia. Tomasini, Maria Cecilia. Recuperado de: http://www.panoramadelarte.com.ar/archivos/Cora%20 Dukelsky/Mesopotamia/MESOPOTAMIA.pdf La relación arquitectura, cultura e ideología. Cantillo María Camila. Recuperado de: http://www.ecohabitar.org/la-relacion-arquitectura-cult ura-e-ideologia/

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Cultivarte

Arte Griego

By Jezzarte - enero 28, 2019

xisten muchas maravillosas creaciones en el mundo, pero, sin lugar a duda, para Grecia, el hombre era la mejor de todas. Su sociedad y cultura se verá forjada bajo este pensamiento, evolucionando con el paso del tiempo en ámbitos como el arte y la literatura, en orden de enaltecer cada vez con mayor fervor la supremacía con la que se veía a el humano.

En la antigüedad, Grecia no era un país unificado como lo es hoy; su territorio se encontraba repartido en diversas ciudades-estado independientes. Se le llamará griegos, a los pueblos instalados en las islas del mar Egeo ubicadas en la Grecia continental, por las costas de Asia Menor, al sur de Italia y de otros lugares del Mediterráneo, que compartían una misma lengua y estructura.

Se le divide en etapas: Edad oscura, llamada así pues son pocas las documentaciones existentes sobre tal tiempo, que comenzará con la caída de la civilización micénica; Edad arcaica, que fue una fase de formación en las ciudades y la cultura se encuentra en acenso; Periodo clásico, en el que las ciudades son ricas y prosperas, y es el tiempo de mayor esplendor; y Periodo helenístico, donde tienen lugar enfrentamientos y guerras que llevarán a un empobrecimiento cultural y económico. Llegando a su fin, con la conquista romana.

La vida compuesta en pequeñas comunidades denominadas polis, generó en los griegos una visión del mundo a escala más humana. Una clara diferencia entre esta cultura y Egipto o Mesopotamia. Además, la práctica política que era frecuente es el debate en asambleas, propiciando el intercambio de ideas, lo que presupone el nacimiento de la filosofía de manera exponencial. Hecho que sucederá con los demás ámbitos artísticos.

El pensamiento y religión manejados en esta cultura, será basado en la razón. Primeramente, la religión servía para mantener el orden y dar sentido a la realidad, a los asuntos del día a día, y se transmitía de boca en boca, no existía un libro sagrado revelado como otras creencias, ello implicaba la ausencia de algún credo y herejías. Estaba controlada por los hombres y no por una casta sacerdotal fijada y estructurada.

Su sistema religioso era público y comunitario, además de politeísta, pues existían dioses vinculados a todos los ámbitos de la vida, desde fenómenos meteorológicos, pasando por el trabajo, amores, hasta la muerte. Su panteón estaba conformado por un gran número y variedad de dioses y diosas así como también héroes y heroínas, colocados entre los dioses y los humanos. Pues a diferencia de los egipcios o mesopotámicos, sus divinidades tenían apariencia y comportamientos propios del hombre, con todos sus defectos y debilidades.

El arte será el medio principal sobre el que se reflejará la idea antropocéntrica. Como una mezcla de lo viejo y lo nuevo, pues cuando los griegos comenzaron su producción artística, retomaron el punto en el que se habían detenido los egipcios, asirios y micénicos.

Cuyo concepto de belleza obedecía a criterios objetivos y racionales, pues se consideraba bella toda realización que reuniera los principios vistos en la naturaleza como el orden, armonía y proporción. Sin embargo, esto no tendría esplendor hasta la época clásica, pues los artistas griegos tuvieron que emprender un largo camino de revoluciones e innovaciones a partir de las herencias recibidas.

Romperían las reglas técnicas rígidas usuales en la representación y se concentrarían en la observación y el estudio del cuerpo humano, es por ello por lo que en la escultura y pintura, existiría un parteaguas artístico: En la escultura se pasó de tener rostros inexpresivos, a una leve mueca de sonrisa, hasta lograr un rostro y cuerpos hechos con gran perfección. El artesano tendría una visión propia y libre albedrío sobre cómo plasmar sus producciones.

La escultura, mayormente usada en bulto redondo, alcanzó una fuerza dramática en sus representaciones; la agonía, el dolor, el movimiento y la victoria fueron temáticas frecuentes. En búsqueda de lograr imprimir al cuerpo humano con mayor dinamismo, concibieron cánones, que eran prototipos ideales a seguir, y composiciones estructurales, como el contraposto; que consiste en representar a una de las piernas estática, mientras que la otra tiene un ligero movimiento que ocasiona que la cadera se curve, al igual que los hombros que lo hacen de manera opuesta. De este modo, el cuerpo describe una ligera curva que crea una oposición armónica y equilibrada.

Con respecto a la pintura, se tiene que tomar en cuenta a la cerámica. Pues será en ella donde se aprecie su uso. En sus inicios, se utilizaba como decoración de platos y vasijas, por medio de patrones geométricos, que apenas destacaban de la superficie. Posteriormente, se introduciría el cuerpo humano y las figuras irán evolucionando de manera progresiva como la escultura. E irá al servicio de las mitologías o escenas memorables.

La solemnidad de las piezas que contemplamos hoy gracias a las tonalidades blancas y grises dista mucho de lo que en realidad eran originalmente. La escala cromática utilizada era azul, amarillo, verde, rojo y oro.

En tanto a la arquitectura, su principal característica es que es monumental, pero no colosal. Fue pensaba en el uso de los humanos. Sus materiales más comunes fueron la piedra y el mármol. Y el recurso de construcción de mayor frecuencia, fue el adintelado. Que es un elemento horizontal entre dos apoyos, para salvar un espacio.

Una de sus composiciones que se transformarían en propias obras de arte, son las columnas. Aumentando su simple función de soporte hacia un valor estético. Otorgándoles vida con mujeres esculpidas en ellas o con alguna de las clasificaciones que existía en lo que concibieron como orden arquitectónico.

Este se referían a las reglas que fijan la forma, tamaño y decoración de las columnas y edificaciones. Los cuales podían diferenciarse entre sí, por el tipo de capitel. El orden jónico es sobrio y de proporciones robustas, su capitel cuenta con varias molduras finas sobre posicionadas. El orden jónico es más esbelto y tiene una apariencia más ligera, su capitel tiene dos grandes espirales a los lados. Por último, el orden corintio, nace como una variación del jónico y en su capitel suelen haber filas de hojas de acanto o rosetas.

Las construcciones más relevantes serán los templos, el teatro y las ágoras. El primero era el arquetipo griego, se destinaba a contener la imagen de una divinidad, y según el número de columnas y su localización, tiene diferentes denominaciones: in antis, próstilo, anfipróstilo, períptero y díptero. Si es períptero o díptero, la línea de columnas que rodea al templo se denomina perístilo. Además, el templo tiene dos fachadas iguales, aunque una de ellas es la principal pues da acceso a la pronaos.

El otro edificio importante del mundo griego es el teatro. Construido aprovechando la pendiente del relieve, tiene forma semicircular y consta de gradas construidas en piedra, el lugar donde se sitúa el coro, que era un elemento fundamental, y el lugar donde se desarrolla la acción teatral.

Por último, en términos de distribución urbanística, el ágora era la plaza principal de la ciudad y tenía dos funciones: una política ya que era la plaza abierta donde se reunía periódicamente la asamblea o conjunto de todos los ciudadanos para tomar, por votación, las decisiones más importantes. Y una función comercial pues alrededor de ella vivían artesanos y comerciantes, junto a las casas de los aristócratas.

Si bien, la perspectiva que se tuvo en la civilización dada en Grecia fue única. No es, en términos de relevancia, bastante diferente a los aportes del resto de culturas ubicadas en territorios vecinos. La importancia con la que se toma hoy en día en ámbitos como el arte, la filosofía o la literatura, recae en que contiene elementos con los que todavía podemos identificarnos.

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BIBLIOGRAFÍA, REFERENCIAS Y RECURSOS

LIBROS

Gombrich, E. H. (1990). Historia del Arte. España: Alianza Editorial.
National Geographic. Maravillas del Mundo Antiguo. RBA Publicaciones, S.A. España. 1994.
Bottéro, Jean. La religión más antigua: Mesopotamia. Editorial Trotta. Madrid. 2001.
Lozano Fuentes, José Manuel. Historia del Arte. Co. Editorial Continental. México. 2001.
Crónica de la humanidad. Plaza & James, Editores, S.A. Barcelona. 1984.
Hauser, Arnold. Historia Social de la Literatura y el Arte. Tomo I, Desde la Prehistoria hasta el Barroco. Ed. Debate. España. 1998.
Elliade, Mircea. Historia de las creencias y las ideas religiosas. Editorial Cristiandad. España. 1978. Rose-Marie & Rainer Hagen. Los secretos de las obras de arte. 100 obras maestras en detalle. Editorial Taschen.

MUSEOS

Museo Nacional de las Culturas. Apartado del Mediterráneo.
Metropolitan Museum of Art. Visita virtual.
British Museum. Blogs.
Louvre Museum. Acervo fotográfico.

RECURSOS

Audilibro de Gombrich, E. H. Historia del Arte.
Videos producidos por CrashCourse.
Documentales: Más humano que lo humano. La historia del arte en tres colores. BBC.

PÁGINAS WEB

Idea. Concepto y proceso en la creación artística. Gombrich, E. H. Recuperado de: http://aliciaciudad.blogspot.es/1229466840/gombrich/
El arte de los pueblos de la Mesopotamia. Tomasini, Maria Cecilia. Recuperado de: http://www.panoramadelarte.com.ar/archivos/Cora%20 Dukelsky/Mesopotamia/MESOPOTAMIA.pdf La relación arquitectura, cultura e ideología. Cantillo María Camila. Recuperado de: http://www.ecohabitar.org/la-relacion-arquitectura-cult ura-e-ideologia/

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Cultivarte

Arte Minoico y Micénico

By Jezzarte - enero 28, 2019

racias a la basta ebullición cultural en el Mediterráneo, en el archipiélago de islas, se encuentran dos civilizaciones de gran actividad cultural. Que deberán ir en conjunto, pues una absorbe a la otra, fomentándola con sus propios rasgos singulares. Hecho que ocurriese más adelante con Grecia y Roma.

Con la llegada de los pueblos indoeuropeos a Grecia y Asia Menor, se produce un cambio generalizado en estas área geográficas. Durante algunos siglos, este territorio presenciará el advenimiento de nuevos pueblos distribuidos en numerosos y pequeños dominios, y los inicios de la civilización minoica. Gracias a que la isla de Creta, donde se instalarían contaba con fertilidad de pastos y la abundancia de tierras cultivables, permitiría a la población cretense crecer rápidamente.

La historia minoica aún no ha sido establecida por completo. Se encuentra dividida en periodos, que son el Minoico antiguo, Minoico medio y Minoico reciente. Y, se sabe que la población fue grande navegante, cruzando el Egeo y el Mediterráneo oriental, dedicados al comercio de madera, cerámica y productos de la tierra que cambiaban por oro, marfil y piedras preciosas, y que establecieron varios puestos avanzados.

El conjunto de la vida económica giraba en torno al palacio, que cumplía a la vez funciones de residencia de la monarquía, sede de la burocracia estatal, centro de los cultos religiosos y almacén central. La base del poder de estos palacios estaba en su capacidad de atesorar los excedentes de producción agrícola, organizar la actividad comercial y la defensa a través de la flota, y producir objetos artesanales en sus talleres. A imitación de los palacios, existen por toda la isla un gran número de asentamientos urbanos de menor tamaño e importancia política y comercial. El carácter completamente centralizado de su economía permite suponer que la sociedad cretense, estaba sometida a una rígida jerarquización y a una tajante división del trabajo.

Los diferentes estratos sociales vivieron en perfecta armonía, organizando una economía desde los grandes palacios, verdaderos centros administrativos. El perfecto funcionamiento de este esquema social y económico se deduce del panorama artístico y arqueológico. Donde los hechos guerreros o de estructuras de dominio por medio de la violencia son inexistentes. Los niveles de destrucción de los palacios corresponden a movimientos sísmicos, sin que haya ninguna huella de conflictos interiores de cualquier tipo. La ausencia de fortificaciones delata la efectividad de la flota, verdadera muralla de madera que protege a la isla.

En cuestión artística, la pintura minoica está documentada en los palacios. En sus comienzos, se trataba de colores lisos, principalmente con un rojo oscuro en la parte inferior de algunas habitaciones. Sin embargo, las destrucciones de las edificaciones dejan apenas algún testigo de lo que fueron. Por lo que, la gran mayoría de frescos conocidos, pertenecen a el Minoico medio y reciente.

La pintura no es una serie de cuadros, tal como los concebimos en Ia actualidad, sino que cubre enteramente las paredes de ciertas habitaciones en palacios y casas, es de carácter mural. Desarrolla un mundo peculiar en las formas y temas tratados muy alejados de los convencionalismos de otras culturas vecinas. La técnica por excelencia es el fresco. Las tintas son planas, sin sombreado ni retoques posteriores. Los colores suelen ser: blanco, rojo, amarillo, azul, verde y negro. Es destacable la simplicidad de las formas. Salvo ciertas excepciones. Su función, ha sido interpretada, como de carácter religioso, aunque es probable que se utilizara como un recurso propagandístico o político.

Su repertorio iconográfico está limitado a escenas paisajistas, pues la naturaleza es la principal fuente de inspiración, mezclando el mundo vegetal y el animal, tanto de su medio fantástico, como del real terrestre o marino, que gracias a su buen tratamiento, han sido utilizadas como testimonios históricos; o de diversas actividades humanas relacionadas con ritos de culto o ceremonias cortesanas.

En las escenas humanas se percibe un estilo de vida en hombres y mujeres cretenses muy diferente a la de sus contemporáneos. Se le daba un color claro a la piel femenina y un rojo oscuro a los hombres. No se encontraban sometidos a reglas de simetría o biología, pues el cuerpo humano en Creta es siempre joven. De contextura atlética y muy ágil.

Por otro lado, la cerámica, será el ámbito donde se denote de forma más completa la evolución del arte minoico. Utilizada con propósitos de almacenamiento de sus productos, cuenta con motivos generalmente curvilíneos, formas oblicuas, sin simetría, cubriendo toda la superficie disponible del recipiente. En algunos casos, Ia propia vasija adopta formas figurativas, tales como ciertas jarras provistas de protuberancias bajo el pico vertedor, a modo de ojos de un cuerpo panzudo de alambicado perfil.

La escultura no tuvo tanta relevancia. Existen figuras talladas en marfil y bronce de pequeño tamaño. Sin embargo, las artes menores serán mayor apreciadas, gracias a su producción de joyas, recipientes de oro y plata y la abundante producción de sellos, cuyo uso fue fundamental para el control del almacenamiento y transporte de mercancías. Quizás ésta sea el ámbito de creación que más remarca la diferencia entre esta cultura y su predecesora de la etapa minoica.

Tal vez como consecuencia tardía de la explosión volcánica registrada en 1500 a.C., la cultura de la isla entró en un periodo de decadencia y desaparecería. Es en este instante, donde los micénicos hacen aparición. Apropiándose de la capital cretense, Cnosos y convirtiéndose en la mayor potencia naval del Mediterráneo. Se encuentra dividida en Micénico antiguo, Micénico medio y Micénico tardío.

Las dos grandes culturas tienen en común, como elemento arquitectónico característico, los grandes palacios, cinco de los cuales han podido ser excavados en Creta. La diferencia consiste en que los palacios de Micenas, menos el de Pilos, estaban protegidos por poderosas fortificaciones, las llamadas murallas ciclópeas. Sin embargo, continuarán siendo el centro de la vida de las ciudades. La base material en que se sustentaba el desarrollo cultural de la ciudad estaba constituida principalmente por la ganadería, la agricultura y los metales preciosos.

En ambas civilizaciones, fue muy importante el culto a la diosa de la Tierra y propiciadora de la fertilidad, la Gran Madre. Varias tablillas de arcilla halladas en Pilos donde se redactaba en dos grupos de escritura: el primero, el más antiguo, recibe el nombre de lineal A; el más reciente se denomina lineal B; demuestran que los doce dioses del Olimpo griego tienen su origen en el período de esplendor de la cultura micénica; en diversas transcripciones de esa época aparecen ya los nombres de Zeus, Hera, Ares y Atenea.

Los cultos religiosos eran de tipo naturalista y estaban dedicados a la fertilidad de la tierra, a los árboles y a los animales; no se construyeron grandes templos, porque las ceremonias se celebraban al aire libre, en cuevas o en montañas a las que se les consideraba sagradas. Las excavaciones arqueológicas demuestran que no se utilizaban imágenes durante los ritos, sin embargo, existían símbolos frecuentes como el hacha doble y los cuernos de animales salvajes.

En el arte los repertorios de temas y el estilo están influidos claramente por la cultura anterior pero a las conocidas temáticas de las procesiones de oferentes, juegos de toros, frisos de animales, plantas, flores y motivos abstractos, se suman escenas de guerra y motivos geométricos, con figuras menos flexibles y estilizadas, cercanas a un cierto esquematismo, en las que se muestra un cambio evidente en la pintura mural micénica con respecto a la minoica, reflejando los nuevos valores de la aristocracia y la población.

La técnica utilizada en la pintura es la misma que en Creta, el fresco, con colores intensos: blanco, amarillo, rojo, azul y negro. Huyendo de las tonalidades suaves y grisáceas. Hay una clara preferencia por los temas de acción o de desfiles procesionales. En general, la figura humana adoptaría una postura rígida.

En el ámbito de la escultura los temas son muy diversos, y van desde figuras aisladas, con predominio de divinidades y animales, hasta escenas de lucha y cacerías. Será de dimensiones reducidas, preferentemente de marfil o terracota.

La cerámica micénica, como la minoica contaba con decorado de pintura, esta se destacaría por ser de un color mate sobre fondo claro. Sus formas son también jarras y tinajas de tamaño medio. Los motivos empleados eran principalmente geométricos, incorporando elementos florales o marinos dibujados de un modo muy estilizado.

El comercio, producido en Creta y Micenas, y en todo el Mediterráneo, no sólo promovió la circulación de productos, con el viajan las ideas. En tal sentido, el mar, más que una barrera, se convierte en un espacio de interacción para las culturas. Por lo que la trayectoria artística en contraste con el arte de Egipto o Mesopotamia, cargado de severidad y voluptuosidad, se revela de un gran refinamiento, muy cuidado, suave, amable, agradable, que demuestra el optimismo con el que se vivió en estos pueblos. No es un arte monumental, sino más humano.

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Cultivarte

Arte Egipcio

By Jezzarte - enero 28, 2019

o que compone al mundo cotidiano es lo que más influencia en el pensamiento, la iconografía y cosmogonía presentes en la civilización egipcia, pues tiene más de natural que sobrenatural. Donde a diferencia de los pueblos acentuados en Mesopotamia con un entorno árido y poco benevolente, el optimismo y fertilidad de la zona donde habitaba el pueblo egipcio eran lo suficientemente importantes como para obtener un lugar dentro de su mitología, y con ella, en su religión y poder. Aspectos que se verán reflejados en el arte producido.

Egipto se encontraba ubicado en los alrededores del río que desde África Central atraviesa el desierto hasta desembocar en el mar Mediterráneo, mejor conocido como el río Nilo. Este, contaba con corrientes amigables, facilitando la navegabilidad. Pero además, en su composición había nutrientes que hacían fértiles las orillas y su interior. Es por ello por lo que el Nilo y el sol serán los elementos más importantes en la vida de los egipcios. De ambos dependía la prosperidad y el alimento.

De esta manera, el territorio va a dividirse en Alto Egipto y Bajo Egipto. El Alto fue la zona sur, que se extiende desde Menfis hasta Asuán. Donde hay menos tierra fértil, pero la ganadería será la actividad característica. Llamada también tierra roja, tendrá elementos simbólicos para reconocerla: la flor de loto y la corona blanca. Mientras que el Bajo Egipto es la región delta del río, que abarcaba desde Alejandría hasta la costa del Mediterráneo, en el Puerto Saíd. Conocida como tierra negra, estaba representada por el papiro y la corona roja. Si estos elementos se veían juntos, representaban a un Egipto unificado.

La procesión cultural, es una de las más largas en la humanidad. Por lo que se le divide en etapas: Reino antiguo, que data del 2649 al 2152 a.C. Donde se encuentran las reconocidas pirámides de Guiza y nace un estado próspero. Llegaría a su fin cuando la sequía y hambruna aterrorizaron al pueblo, y la figura del faraón se debilita, dando como resultado la división del país. El Reino medio del 2040 al 1640 a.C., en el que Egipto se unificó de nuevo y el poder estuvo a cargo de los hicsos; hasta el momento en que los egipcios consiguieron expulsarlos, se daría el comienzo del Reino nuevo, del 1550 al 1070 a.C. En el que el pueblo se convertiría en una potencia militar dotada. Los majestuosos templos de Karnak y Luxor, y los hipogeos en el Valle de los Reyes y las Reinas tendría lugar. Su esplendor terminaría con la última reina, Cleopatra.

Sin embargo, a pesar de contar con demasiado tiempo de historia, Egipto fue un territorio organizado y estable desde sus comienzos. En su evolución, gracias a su casi total aislamiento con otras culturas, contará con un estilo artístico constante, poco permeable de influencias externas. Hasta la llegada de los griegos y romanos, o la única ocasión interna, con Akenatón en el Imperio Nuevo.

Contaban con una organización sociopolítica basada en tres aspectos principales, que eran la autoridad civil representada por el faraón, el mediador entre los dioses y el hombre. La religión y el culto a los muertos, como una creencia de vida en ultratumba. En primera instancia, el faraón, quien fue el jefe del ejército y sumo sacerdote, después seguido de la aristocracia, con sacerdotes y nobles; a continuación los escribas, el ejército y el pueblo. Existía como un poder absoluto y centralista: la monarquía. Basada en la relación de sangre, conocida como dinastía. El faraón tendrá un desarrollo iconográfico de poder, donde se le plasmaba por lo general en solitario. Con rasgos de frontalidad, hieratismo, simetría y perspectiva jerárquica. Puesto con atributos que ayudan a su identificación, como lo son la barba ritual o las coronas de un Egipto unificado.

El segundo aspecto es la religión, característica por ser politeísta y compuesta de una cosmogonía diversa, fue instaurada en el ámbito político. Donde está incluida la divinización del faraón y su ceremonia de coronación. Cada ciudad tenía un dios supremo y otros secundarios. Se presentan en formas complejas, antropomórficas o mitad animales, mitad humanas. Pero, a pesar de su ser enaltecido, también podían morir.

La muerte, será el aspecto de mayor importancia en la historia de Egipto. Sus creencias funerarias se conocen principalmente a través de los rollos de papiro que las narran, y por medio de la lectura de los jeroglíficos, los cuales son el sistema de escritura más importante de los cuatro que tuvieron lugar en la región. Estos se pudieron comenzar a traducir gracias a que Napoleón encontró “la piedra de Rosetta”, donde estaba escrito un texto en tres lenguas distintas. Una de ellas sería el griego, de ahí se traduciría al francés y comenzaría la habilidad de poder leer esta escritura que en su momento fue exclusiva para la nobleza y aspectos religiosos.

Los egipcios creían en una vida después de la muerte, sus versiones y pasos a seguir en ella se encontraban distribuidos en los cuatro libros de los muertos. Donde la vida eterna era la meta a conseguir, pues la actual era tan sólo un estado de transición. Es por esto, que el proceso de tratamiento de un cuerpo, conocido como momificación, implicaba un gran ritual.

Cuando el cuerpo dejaba de funcionar, se procedía a realizar un ritual de apertura de la boca, luego se extraía el corazón y las vísceras, que serán puestas en vasos canopos para su conservación. Pues se creía que a el muerto le podrían hacer falta en el proceso de llegar a el más allá, como lo sería el corazón en el momento de ser pesado por el tribunal. Después se procedía al secado del cuerpo durante aproximadamente sesenta días, para luego vendarlo e introducir entre los giros de las vendas, objetos y amuletos mágicos. Se le colocaba una máscara y se le introducía dentro de un sarcófago, el uso del material dependía en el estrato económico. Este se colocaba dentro del respectivo mausoleo, y junto a él se dejaban sus órganos, riquezas o lo que él quisiera llevar a la siguiente vida. Luego se procedía a sellar la cámara y la puerta. Todo el proceso iba acompañado de oraciones diversas.

Estos tres aspectos, no solamente bases de su estructura social, hará deudor a su arte como un medio de sus concepciones. Que tienen por objeto la magnificencia del poder y la glorificación de la vida de ultratumba, respondiendo a una creencia firme en la eternidad y perfección de la vida, tal como podían observarla en su alrededor.

La existencia más memorable del arte egipcio es sin duda alguna, la arquitectura. Es de dimensiones colosales, y por sus materiales empleados, destinada a perdurar en el tiempo. Los modelos más representativos serán los templos y tumbas. Estas últimas siempre tendrían la intención de preservar y proteger los cuerpos para la eternidad, incorruptos gracias al embalsamamiento, y conservar eternamente el alma. Comenzaron siendo enterramientos simples con túmulos, lo cual, con el tiempo evolucionaría a las mastabas. Que son una construcción sobre una cámara sepulcral. Con una estructura externa formada por paredes que estaban inclinadas hacia un centro común.

Si se construyen varias mastabas superpuestas, se obtendrá el emblema de poder del estado del Reino antiguo: las pirámides. Estaban recubiertas en la superficie, con placas de alabastro y en su interior hay varias cámaras y corredores que fungían de diferentes maneras. Una de las cámaras, era la del sepulcro, ubicada de manera subterránea; las demás eran provisionales o falsas. Para evitar el frecuente saqueo que existía.

Pero no fue suficiente, por lo que pronto la idea de las pirámides se abandonaría para comenzar a dar una interiorización al espacio funerario: los hipogeos. Estos contaban con una fachada oculta al exterior, en la que detrás se situaba un corredor, con diferentes capillas o dependencias, y en el fondo, la cámara sepulcral. El único recurso que fue usado en todas estas estructuras fue la decoración. Hecha con pinturas y relieves con motivos sacados de textos religiosos.

En lo que a construcciones de templos se refiere, la tipología es muy abierta. En primera instancia estaban dedicados para albergar la imagen del dios al que se le atribuyera la edificación, y no estaban abiertos para el pueblo. Se les puede dividir en tres según su finalidad: clásico, funerario y astral.

Por otro lado, existe una división en la escultura, la solemnidad contra la cotidianidad. Sin embargo, sobre cualquiera de estas afectan dos leyes principales: la frontalidad y el principio de jerarquía. La primera se trata de presentar a los personajes de frente, sin torsión en ninguna parte del cuerpo. Sin embargo, en el caso de los relieves y pintura, esto se traduce a una representación de las figuras con cabeza y piernas de perfil, y ojo y torso de frente. Con el propósito de hacerlas más reconocibles. En tanto a el principio de jerarquía, se trata de representar a mayor o menor escala a los personajes según su importancia.

En el caso de la pintura y el relieve, adquirieron gran desarrollo en Egipto. Están cargados de convencionalismos y estereotipos al igual que la escultura. Desde el punto de vista técnico, en la pintura se utilizó frecuentemente el fresco, retocado posteriormente con temple en seco. Con funciones decorativas y ornamentales, suelen complementar las arquitecturas funerarias con representaciones religiosas o temas cotidianos. Existía el predominio del dibujo sobre el color, que suelen ser duros y planos sin degradación tonal, pues el trabajo se hacía por cuadrillas.

Las características que utilizaron los artesanos podrían traducir al arte egipcio en un arte rígido. Sin embargo, no se trata de un arte carente de vida, sino pleno de ella. Cuando se piensa en las grandes civilizaciones del pasado, es posible, que la mayor imagen representativa de ellas sean las pirámides. Debido a que son las únicas sobrevivientes de la lista de las siete maravillas de la antigüedad. Tanto la civilización como el arte de Egipto es grandioso, eterno y optimista. Grandioso porque busca convertir los monumentos en colosales alcances de lo divino; eterno porque emplea materiales perdurables y por su estilo establecido a lo largo del tiempo; y optimista por la serenidad que le otorga a la vida feliz en el más allá.

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